Los tratamientos neuromoduladores son procedimientos estéticos que ayudan a suavizar las arrugas dinámicas y a prevenir la formación de líneas de expresión. Estos tratamientos se han convertido en una de las opciones más demandadas para lograr un aspecto rejuvenecido sin necesidad de cirugía.

Los neuromoduladores son sustancias que actúan relajando temporalmente los músculos faciales responsables de la formación de arrugas. Su aplicación es segura y eficaz para atenuar las líneas de expresión causadas por la gesticulación, como las patas de gallo, el entrecejo y las arrugas de la frente.

• Reducción de arrugas dinámicas: Atenúan líneas de expresión sin afectar la naturalidad del rostro.
• Prevención del envejecimiento: Evitan la profundización de arrugas a largo plazo.
• Procedimiento rápido y seguro: Aplicación en minutos, con resultados visibles en pocos días.
• Uso terapéutico: También se utilizan para tratar problemas como el bruxismo, la hiperhidrosis (sudoración excesiva) y las migrañas tensionales.

• Evaluación personalizada: Un especialista analiza tu rostro y determina las zonas a tratar.
• Aplicación del neuromodulador: Se realiza mediante microinyecciones en los músculos específicos.
• Resultados progresivos: En 3 a 7 días notarás un rostro más relajado y rejuvenecido.
• Duración de los efectos: Los resultados pueden durar entre 3 y 6 meses, dependiendo del paciente.

Los tratamientos neuromoduladores son ideales para personas que desean prevenir o reducir los signos del envejecimiento de forma no invasiva. También están recomendados para quienes buscan aliviar problemas funcionales como el bruxismo o la sudoración excesiva.